Prisma es un programa de rehabilitación psicosocial para personas que han sufrido un problema grave de salud mental. Pertenece al departamento de bienestar social de la Mancomunitat del camp de Turia. El Programa surge de la necesidad de un cambio en la asistencia prestada desde el área de Salud Mental, con el objetivo de promover la integración activa de cada persona en su comunidad de origen, generando autonomía personal y social y , por lo tanto, mejorando la calidad de las personas que asisten al programa.

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Se trata de un programa de trabajo en diferentes áreas de actuación formadas por diferentes perfiles profesionales de la psicología y la integración social.

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En Enero de 2019 se pusieron en funcionamiento dos recursos ubicados uno en Bétera y el otro en Vilamarxant, en 2020 se ampliaron a dos programas más ubicados en Pobla de Vallbona y Riba-Roja del Túria, en 2023 se abrió un recurso en Marines y en Septiembre de 2024 otro en la Eliana, dando servicio a más de 100 personas.

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Se trabaja de manera coordinada, creando una red, entre los dispositivos de Servicios Sociales de cada municipio y con las dos Áreas de Salud: Hospital de Manises y Arnau Vilanova – Lliria. Y a su vez, con las cinco Unidades de Salud Mental que abarca la Comarca.

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 Los objetivos del programa son:

• Favorecer la adaptación e integración de las personas con problemas de salud mental crónica en su entorno así como su participación activa en los diferentes contextos.

• Desarrollar y mantener un nivel óptimo de calidad de vida, aumentando su autonomía e independencia personal.

• Orientar a las familias de las personas con problemas de salud mental crónica, ayudándoles a mejorar sus capacidades, los recursos de adaptación a la enfermedad y su propio autocuidado.

• Trabajar conjuntamente con los servicios de Salud Mental y con los de Servicios Sociales, colaborando y coordinando la atención integral de los usuarios y potenciando los procesos de recuperación personal y soporte comunitario.

• Potenciar y dinamizar la articulación de los recursos socio-comunitarios para así conseguir el principio de normalización, eliminando las barreras sociales que dificultan la consecución del mismo.

• Impulsar acciones de información y sensibilización a la población sobre la salud mental, para prevenir y/o reducir el estigma y exclusión social existente y favorecer la no-discriminación de estas personas y sus familiares.

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